A pesar de ser un tratamiento seguro, el tener implantes dentales, en ocasiones mínimas, puede ocasionar molestias al paciente.
Por este motivo, se mencionarán cinco de los riesgos más comunes con los que se puede encontrar una persona a la hora de ponerse implantes dentales.
1. Inconvenientes postoperatorios
Como toda intervención quirúrgica, la colocación de implantes dentales supone el riesgo de que se padezca algún tipo de inconveniente postoperatorio. Infecciones, sensación de anestesia, daños o sensibilidad en otros dientes, vasos sanguíneos, nervios, encía o labios, son algunos de estos problemas infrecuentes que pueden surgir y que el dentista puede tratar con facilidad.
2. Falla en la osteointegración
Casi el 95% de los tratamientos con prótesis compuestos por implantes dentales son exitosos. En estos casos, los implantes, al estar hechos de titanio biocompatible, son integrados al organismo con éxito en un proceso que se conoce como osteointegración. Sin embargo, en algunas oportunidades, esta osteointegración puede fallar por determinados tratamientos, enfermedades o hábitos previos del paciente, por cuestiones biológicas o por errores del odontólogo.
3. Enfermedades por falta de higiene
Las fallas en los implantes dentales puede estar ocasionado por la acumulación de placa. La forma en que se encuentra colocado un implante o las características de la su superficie hacen propenso la acumulación de placa bacteriana en la zona. Esto puede traer como consecuencia el contagio de una gingivitis.(motor para implante dental)